Esa fantastica pieza humana
es parte de los albures de todo hombre y toda mujer,
sabrá enseguida que su realidad es otra,
ya no sera la misma,
tiene en sus brazos un niño,
con un nombre pero sin un destino,
cuánto tendra que ver ella en que no sufra,
cuál sera la tragedia que lo eludirá o puede que no,
cómo se agarra algo tan pequeño,
es... segun dicen el instinto,
pero es una mujer,
y piensa demasiado.
Es sencillamente una madre
obligada a salir al enorme escenario
donde voces ancestrales y otras cercanas
le dicen
acá estas...
parada frente a la maternidad.
Y eso es estar sola.
No hay comentarios :
Publicar un comentario